OUKA.ES – LA CARIDAD (EL FRANCO) – 1.376 HABITANTES
Una escuela de aventura costera. Yonander García emprendió un negocio en la playa de Porcía con el que ofrece a los visitantes de El Franco practicar deportes acuáticos y conocer el litoral del concejo, de una manera diferentes y respetuosa con el medio ambiente

GIOVANNA F. BERMÚDEZ

La costa occidental asturiana ofrece un gran abanico de oportunidades para aquellos que la conocen, la respetan y se deciden a explotarla asegurando su conservación. Este es el caso de Yonander García, un franquino que hace tres años decidió diversificar la actividad pesquera que realizaba durante los inviernos, montando una escuela de aventura en el entorno de la playa de Porcía. Un negocio de turismo activo que combina diferentes deportes acuáticos con rutas guiadas por los parajes del litoral, en el concejo de El Franco. Esta idea le ha servido al emprendedor para quedarse en su tierra, pero también ha sumado una nueva oferta a los visitantes de la zona, poniendo a su disposición diferentes opciones para conocer la historia y disfrutar de la biodiversidad de este enclave, de una manera entretenida y respetuosa con el medioambiente.

Yonander García, natural de El Franco, orientó siempre su formación profesional y su vida laboral al mar. Desde hace varios años se dedica al sector pesquero, concretamente al percebe. Una actividad muy estacional, que le dejaba tiempo libre los veranos para dedicarse a otros trabajos, por lo que decidió diversificarla con una ocupación que combinase todos sus conocimientos de la zona y del entorno marino con el turismo y deportes acuáticos en auge como el surf o el kayak. De esta manera, en 2018, nació Ouka, una escuela de aventura que tiene su base en la playa de Porcía.

«Viajé por varios lugares y vi que había empresas como esta en sitios mucho más mediocres que funcionaban. Entonces me dije: esto en Porcía tiene que triunfar», comenta el empresario, buen conocedor de todos los recursos que ofrece este entorno y amante de todas las peculiaridades que tiene su tierra. «Toda esto es zona de Especial Protección para las Aves (ZEPA) y está catalogado también como Lugar de Importancia Comunitaria (LIC), es una ensenada muy tranquila con mucha biodiversidad», explica, señalando la recortada costa que puede observarse desde la caseta de su empresa, un entorno «de calidad e inigualable».

En esta escuela de aventura, García combina su formación como guía de la naturaleza con su actividad pesquera y con deportes acuáticos que domina, ya que además es técnico deportivo de surf y de piragüismo. Precisamente en Ouka ofrece a los visitantes de la zona alquiler de material para practicar estas modalidades y también kayak de mar y paddle surf. Para esta última práctica, García también cuenta con una llamativa tabla tamaño XXL, en la que llegaron a subirse al mismo tiempo diecisiete personas. De todos estos deportes ofrece cursos, adaptados a todas las edades. Pero lo más singular de este negocio son las actividades en las que todos estos deportes se unen con la naturaleza en rutas guiadas.

«Hacemos travesías marinas desde Porcía hasta el puerto de Viavélez y luego hasta la playa de Pormenande, también hacemos un tramo del Camino de Santiago en kayak de mar, vamos viendo la costa, la fauna, las diferentes especies, también vemos castros y les hablo de la cultura castreña de la zona o de lugares como el cargadero de mineral de hierro», comenta García.