NALÓN ACTIVO – SAN ROMÁN (CANDAMO) – 290 HABITANTES
Un río por descubrir. Joel García y Alfonso Vivero son el motor de ‘Nalón Activo’, un proyecto que ofrece descensos por el río y paseos por la ría, «que tiene mucho que ver» remando
MARÍA JARDÓN
El Nalón es «un río que está por descubrir». Ese es uno de los motivos que hizo que Joel García, que ya contaba con la empresa Eo Activo en la ría del Eo, se animase a emprender en San Román, parroquia del concejo de Candamo, a orillas del Nalón. Se puso en contacto con Alfonso Vivero, entrenador del club de piragüismo Los Cuervos de Pravia, y éste no dudó en sumarse al proyecto. Juntos comenzaron la andadura de Nalón Activo hace apenas un año y se están preparando para su segunda temporada, que arranca en junio.
Lo más complicado para los jóvenes emprendedores en un primer momento, fue conseguir clientes, «al ser un río que no tiene el auge que tiene el Sella, posicionarnos en internet y darnos a conocer a hoteles o casas rurales fue difícil», recuerda Vivero, gerente y monitor de Nalón Activo. Aún así, el balance que hacen de su primer año en funcionamiento es muy positivo «superó las expectativas y los objetivos que teníamos marcados, la idea es este año crecer un poco más», añade.
Estos dos emprendedores, más su equipo, que en temporada alta alcanzó los seis monitores, ofrecen descensos en canoa por el Nalón y puntualmente, en función de la demanda, paseos en canoa por la ría, «explicando un poco la historia de la ría del Nalón que tiene gran importancia y mucho que ver», destaca el gerente. Es importante señalar que la temporada alta de este río va de junio a agosto, «en septiembre aguantamos, pero días puntuales», precisa.
El descenso lo realizan desde San Román de Candamo, donde tienen la sede, hasta Pravia. Se trata de un descenso de unas dos horas y media o tres, en el que además organizan «una paradina de media hora para que la gente tome el bocata o se bañe en el río», explica. Es una actividad abierta a todo el mundo, a partir de los 5 años, y en la que siempre se va acompañado, «cada 10 canoas hay un monitor y nuestra capacidad máxima es para 80 personas», precisamente porque «no queremos grandes afluencias». De hecho, este es uno de los aspectos que han valorado muchos de los clientes que recibieron en la temporada de su inauguración, «vino mucho turista que ya conocía el Sella y querían hacer una actividad evitando la masificación que hay en él», señala. Por otro lado, también acudieron «asturianos que tenían la inquietud de descubrir este río», añade.
La zona del Nalón puede ofrecer muchas oportunidades para el emprendimiento, «tanto para el turismo activo como para la hostelería», reflexiona, y es que considera que este entorno «tiene un potencial tremendo desde todos los puntos de vista del negocio». Aunque opina que para facilitar un poco más el emprendimiento en el entorno rural «habría que fomentar un poco los trámites administrativos y haría falta más apoyo desde las instituciones hacia los proyectos jóvenes».
Para el gerente, apostar por montar un negocio en un pueblo ofrece una «calidad de vida brutal», algo que se disfruta en el día a día y que no tiene nada que ver con «la masificación de la ciudad».
Un emprendimiento muy necesario, ya que aporta mucho a los núcleos rurales. En el caso de Nalón Activo, por ejemplo, ofrece «visibilidad y atrae turismo», destaca Vivero. «Como dice nuestro lema, ‘Asturias no sólo es el Sella’ ofrecemos una zona que descubrir a la gente», aduce. Pero no sólo esto, en su caso también generan empleo, ya que los monitores que contratan en temporada alta son vecinos del entorno. «Tenemos un convenio con el Club de Piragüismo de Los Cuervos, por el cual formamos a los monitores que contratamos. La prioridad es la gente del club y si no hay, pues buscamos fuera», concluye.