CENTRAL ARTÍSTICA DE BUEÑO – BUEÑO (RIBERA DE ARRIBA) – 126 HABITANTES
La Central Artística de Bueño nace para ser «un buen revulsivo para fijar población», así como tener un importante impacto socioeconómico en la zona al «atraer nuevos proyectos»
MARÍA JARDÓN
Con el objetivo de «traer cultura hacia la zona rural», algo que confían en que «ayude a fijar población», abrió sus puertas el pasado mes de septiembre, la Central Artística de Bueño. «En la zona rural hay muchas inquietudes culturales y hay que dotarla de actividades», explica Patricia Álvarez, concejala de Cultura del Ayuntamiento de Ribera de Arriba.
La Central surgió de la primera edición del Concurso de Arte Público puesto en marcha por la Fundación EdP, al que se presentaron diversos proyectos pero este espacio conquistó al jurado «por su sencillez, la utilidad que tiene y que era un diseño moderno pero que no rompía con el entorno», apunta, de hecho, se integra a la perfección en la finca en la que se encuentra.
La principal idea de este concurso era «potenciar el arte y las construcciones», comenta Álvarez. Se presentaron los alumnos del último curso de arquitectura de diferentes universidades españolas, y los ganadores de la Universidad de Zaragoza: Marta Molins, Diego Catena y Claudia Gadea; han podido vivir todo el proceso desde la elaboración del proyecto hasta la finalización de las obras.
La elección de Bueño para instalar este espacio cultural no ha podido ser más acertada. «Es un pueblo pequeño, muy cerca de Oviedo, pero con mucha inquietud cultural, hay una Asociación cultural y los vecinos organizan muchas actividades», señala la concejala. Entre ellos, cuentan con un Festival Internacional de Jazz que lleva más de 25 años celebrándose, un encuentro de pintura al aire libre o un encuentro de poesía y fado. Esta «inquietud cultural» es la que hizo que se pensara en aprovechar la casona y la finca, que se había comprado a la familia de Carlos Prieto, para que el CAB viera la luz. Cumplieron así además el deseo de sus antiguos propietarios, «una de las cosas que pidió la familia fue que se dedicara al arte», añade Álvarez.
Había mucha expectación por parte de los vecinos con respecto a la Central, ya que «el concurso y la difusión nos pillaron en plena pandemia y confinados», pero esperan que sea un «revulsivo para fijar población», afirma la concejala. De la misma manera, cuentan con que tendrá un importante impacto socioeconómico en la zona, «va a tener muchas visitas y mucho movimiento, al visitar la zona siempre van a surgir ideas para desarrollar otros proyectos y que la gente se asiente aquí en Ribera», confía.
Por otro lado, contar con un espacio así sin duda atraerá cultura algo que no es habitual en el medio rural, «muchas veces porque los artistas no pueden trasladarse o porque piensan que la gente en los pueblos no lo va a entender», afirma la concejala.
El edificio cuenta con un auditorio semisoterrado en el que se realizarán exposiciones y diversos proyectos al ser una sala muy polivalente y versátil, cubierto por un escenario 180º en el que se podrán desarrollar espectáculos al aire libre que pueden albergar un total de 3.000 espectadores. Hasta el próximo 17 de diciembre la sala acogerá la exposición ‘Love Cry’ del artista visual João Pimenta Gomes.
En cuanto a la otra parte del complejo, la Casa de las Artes, ha sido inaugurada con una exposición ‘Herminio. Calma y movimiento’, del artista asturiano Herminio Álvarez que también se podrá visitar hasta el 17 de diciembre.