CANTIA NUTRICIÓN – VILLANUEVA (SANTO ADRIANO) – 134 HABITANTES
Cantia Gutiérrez puso en marcha Cantia Nutrición el pasado mayo en la villa tecnológica El Sabil. Desde allí ofrece asesoramiento nutricional de manera presencial, online y a domicilio
MARÍA JARDÓN
Cumplir un sueño, eso es lo que hizo Cantia Gutiérrez el pasado mes de mayo al poner en marcha Cantia Nutrición, y es que «siempre me había hecho ilusión trabajar en el mismo sitio donde vivo».
Esta santanderina llegó a Oviedo a estudiar con 18 años, «allí conocí a un chico de este valle y nos vinimos a vivir y a tener nuestra familia aquí», relata. Esto ocurrió hace diez años, momento en el que se quedó embarazada y dejó su trabajo para atender a sus hijos. «Ahora que ya son más mayores y dependen menos de su madre, decidí ponerme a estudiar y me lancé al emprendimiento», explica, y es que Gutiérrez, aunque ya tenía la carrera de Biológicas, se sacó ahora una FP y se preparó al máximo para su nuevo proyecto. Fue un paso «muy estudiado», en primer lugar acudió a Valnalón, donde le ayudaron a hacer un estudio de mercado de la zona y «vimos que podía ser viable», recuerda.
Se hizo con una sala en la villa tecnológica El Sabil, en Villanueva, y terminó de dar forma a su emprendimiento hace apenas tres meses. En Cantia Nutrición realiza asesoramiento nutricional enfocado al control de peso y también trabaja en hábitos y nutrición infantil, se enfoca principalmente en asesorar a sus clientes para alimentarse de una manera sana. Su clave es «una metodología flexible basada en las circunstancias y necesidades del paciente», puntualiza. De esta manera se adapta a sus horarios, a si tiene hijos o no, y al tiempo del que dispone. «Si propongo algo rígido lo más probable es que lo abandone y haciéndolo de esta manera, con pequeños pasos, se va consiguiendo cambiar hábitos», explica.
Además de las consultas presenciales, ofrece la opción de realizarlas a través de internet e incluso, en el caso de que el paciente no pueda desplazarse, da la alternativa de realizar las sesiones a domicilio, algo importante en el medio rural, en particular con las personas más mayores. Por otro lado, imparte talleres en colegios, en asociaciones o en entidades que lo necesiten. Un servicio que ya ha ofrecido en algunos centros escolares del valle y de los que destaca que «los niños sí que saben, tienen ya conceptos muy básicos sobre nutrición pero siempre tienen esa reticencia a comer más verdura», afirma.
Gutiérrez destaca que hoy en día, tanto en el medio rural como en la zona urbana hay una mayor preocupación por la alimentación. «Se nos está bombardeando desde los medios, cada vez hay más información sobre todo y eso incluye la salud y la alimentación», resalta, por lo que hay una mayor preocupación por comer bien. Sin embargo, es más fácil comer mejor en los pueblos: «Tengas huerta o no siempre recibes algo de los vecinos, que si un calabacín o unos tomates, y eso te motiva más a comer verdura, pero además, el acceso a los procesados es menor», reflexiona. «Uno que vive en una ciudad, si le apetece, baja al supermercado y ya lo tiene; en la zona rural no lo tenemos e igual nos quedamos con las ganas».
Aún así ella destaca que esta vida lejos de la ciudad le aporta «mucha tranquilidad y conexión con la gente que me rodea», algo que sin ninguna duda le permite estar «más relajada y evitar ciertas preocupaciones». Agradece también estar en El Sabil, pues «me permite hacer sinergias con otras empresas que están instaladas allí y conciliar, porque el local en el que estoy está entre el colegio y mi casa», algo a lo que le da gran valor.
Destaca que con Cantia Nutrición pretende «llevar la salud a la zona rural que está tan desatendida en servicios, e intenta concienciar sobre la alimentación y los hábitos necesarios para llegar a tener una buena salud».