ALEJANDRO RODRÍGUEZ. CAFÉS EL GLOBO – CASAZORRINA (SALAS) – 54 HABITANTES
Un café con historia. Lejos de ceñirse estrictamente a su actividad laboral, la empresa apuesta por atraer turistas a Salas con la reciente puesta en marcha de visitas a sus instalaciones, además de potenciar la formación de baristas y hosteleros en el servicio de café
CARLA VEGA
La historia de Cafés El Globo se remonta a 1965, cuando José Pérez Gómez, vecino de Tineo, decidió comenzar a trabajar el café con apenas un pequeño tostador de bola. Cincuenta y cinco años después, el proyecto que inició en su propio hogar se ha convertido en la primera empresa española en contar con el sello ‘Tostador 100% arábica’. Entremedias han sido muchos los logros conseguidos, el primero de ellos, casi una década después de que comenzase el negocio, fue trasladarse de Tineo a Salas para ampliar la superficie de trabajo. Desde entonces, Casazorrina ha sido testigo de los avances de Cafés El Globo, que puede presumir de unas renovadas instalaciones que se adaptan a los tiempos que corren.
«En 2019, tras un año de trabajo, finalizamos las reformas de estas instalaciones en las que ahora no solo fabricamos nuestro producto, sino que además realizamos formaciones con nuestros clientes, y recientemente hemos incluido las visitas turísticas», explica Alejandro Rodríguez, director comercial de la empresa. Y es que, más allá del lema que instauró José Pérez con la fundación de Cafés El Globo, ‘calidad y servicio’, desde que su hija Rosa tomó el relevo a los mandos podemos añadir ‘adaptarse a los nuevos tiempos’ a esa frase.
Con la llegada de la pandemia el trabajo comenzó a cobrar más sentido que nunca de puertas hacia dentro. «Nuestros clientes no podían abrir sus negocios, y tampoco podíamos visitar a posibles nuevos clientes, por lo que aprovechamos ese tiempo para reflexionar, pensar en nuevos proyectos, y qué podíamos hacer mejor o diferente», cuenta Rodríguez, Fue un momento que sirvió, por ejemplo, para preparar un gran catálogo que aunara todos sus productos sin dejar a un lado las características que hacen único a cada uno de ellos. Pero, además, también surgió la opción de iniciar las visitas turísticas.
«Quisimos ayudar a la comunidad, al concejo de Salas. Surgió la idea de preparar unas visitas que atrajesen al público al pueblo, y mostrarles cómo es el trabajo aquí, desde el inicio hasta el final del proceso, terminando con una cata de nuestros productos», detalla Natalia Díaz, promotora responsable de eventos de la empresa.
Estas visitas han tenido una gran acogida, y se suman a otros proyectos como el campeonato de Aeropress que organizan desde 2018, donde baristas profesionales y amateurs demuestran sus dotes utilizando este tipo de cafeteras. Estos no son más que algunos ejemplos de todo lo conseguido por el tostadero de café desde su apertura. Actualmente, pueden afirmar que son la primera empresa asturiana en contar con un certificado ‘Q Arábica Grader’, gracias al propio Alejandro Rodríguez González, quien es, además de director comercial, catador y juez barista. Son muy pocas las empresas cafeteras que cuentan con un catador con este certificado entre sus filas, pero por si esto fuera poco, desde 2020 también se han convertido en el certificado ‘tostador 100% Arábica’, eliminando la robusta de todos sus productos, siendo la primera empresa española en contar con tal distinción. Que todo esto se haya conseguido en menos de cien años de historia, hace pensar que a Cafés el Globo aún les quedan muchos éxitos, y café, que cosechar.